Viajar sola al exterior puede ser un descanso muy necesario de las obligaciones sociales cotidianas, una oportunidad de explorar de forma independiente y participar en comunidades locales sin seguir el ritmo de nadie más que el propio.
“Uno de los grandes beneficios de viajar sola es que tenés la oportunidad de estar más en contacto con vos misma y vivir una experiencia más profunda en cualquier cultura que estés visitando”, dijo Sasha Landauer, de 27 años, que trabaja en una editorial de Nueva York. Su primer viaje sola, durante un año sabático antes de empezar la universidad, fue a Nepal. Desde entonces ha viajado sola a Tanzania y Kenia.
Sin embargo, para viajar sola hay que tener en cuenta ciertas consideraciones, en particular en países donde el idioma y la cultura pueden resultar desconocidos.
A continuación, se ofrecen algunos consejos para que las mujeres estén seguras y puedan disfrutar de viajar solas.
1) Elegir un destino
En internet abundan la inspiración, las guías y otros recursos para mujeres que viajan solas.

Wanderful es una red basada en membresías (9 dólares mensuales) con 50 centros en Londres, San Francisco y Bruselas, entre otros lugares, y una comunidad online.
Unearth Women ofrece “guías femeninas de ciudades” online, con recomendaciones de hoteles y restaurantes.
Es mejor elegir un destino consagrado, pero no abarrotado de gente, aconseja Elise Fitzsimmons, coautora de Wanderess, una guía para mujeres que quieren viajar “de manera inteligente, segura y en solitario”.

“Siempre lo paso mejor en los países donde hay industria del turismo, pero no una sobreexplotación turística”, dijo.
En general, las ciudades o pueblos más pequeños y transitables son amigables para las mujeres que viajan solas, al igual que los destinos con sistemas de trenes confiables.
“Cartagena (Colombia) es una ciudad increíblemente transitable a pie. Tiene mucha cultura, por lo que es un gran destino para viajar sola. Es asequible”, dijo Nikki Vargas, cofundadora de Unearth Women y coautora de Wanderess, que también recomienda Madrid y Barcelona en España; y París y Borgoña en Francia.
Sitios como HoodMaps brindan información sobre dónde alojarse, qué barrios son divertidos para explorar y qué zonas conviene evitar.
“Me gusta alojarme cerca del centro de la ciudad, cerca de los lugares más frecuentados”, dijo Vargas, que también recomienda buscar reseñas escritas por mujeres solas.

Si te gusta el senderismo o el trail running, las montañas Dolomitas en Italia y el circuito Tour du Mont Blanc en Francia son excelentes para quienes viajan solas. En los senderos hay buena cantidad de personas, incluso otras mujeres solas, y muchas de las cabañas tienen comidas comunitarias.
2) Antes de partir
Es mejor tener planificados los primeros días, incluido el alojamiento, tener un itinerario aproximado y saber en detalle cómo llegar desde el aeropuerto o la estación de tren hasta el hotel o departamento (recordá, los taxis pueden ser caros cuando estás sola.)
Antes del viaje, comunicales tu itinerario a amigos y familiares y enviales actualizaciones si algo cambia. También podés compartir la ubicación de tu teléfono con familiares o amigos a través de aplicaciones como Find My Friends de Apple o Life 360 para dispositivos Android.
Evaluá comprar un plan telefónico internacional con datos. O descargar una eSIM (una tarjeta SIM digital que activa un plan telefónico sin una tarjeta SIM física) antes de salir de casa para tener servicio tan pronto como aterrices.
Además, descargá Google Maps para tu destino para no depender de la conectividad del dispositivo para navegar.
Tené en cuenta las costumbres locales, como las relacionadas con el recato y la elección de ropa. Reddit, grupos de Facebook específicamente para mujeres que viajan solas y guías como Lonely Planet son puntos de partida útiles. Fitzsimmons recomienda que te imagines como «un observador».

«Observá si hay diferencias de género, diferencias de edad, diferencias de tono, y preguntá. A la gente le agradará hablar con vos de lo que sucede en su país», dijo.
Tratá de llevar un equipaje lo más ligero posible. Es importante ser autosuficiente y puede que te sientas más vulnerable si llevás mucho equipaje.
3) Al llegar al destino
“Hablá con los lugareños y con las personas que administran tu hotel u hostal y está atenta a su experiencia una vez que estés en el lugar”, dijo Fitzsimmons.
En lugares públicos, sé inteligente: prestá atención a tu entorno en todo momento y evitá mirar el celular o usar auriculares. Hay algunas ciudades y barrios que parecen bastante seguros, incluso después del anochecer, pero sabé siempre con exactitud a dónde vas. Muchas mujeres también se abstienen de consumir alcohol cuando viajan solas.
Si tenés varias cuentas bancarias, Fitzsimmons recomienda llevar sólo una tarjeta cuando salgas de tu alojamiento y guardar el resto en tu habitación. Dividí el efectivo en distintos bolsillos.
Apple Pay también puede ser una opción: si tenés un iPhone, pagar con el teléfono te evita tener que elegir entre diferentes tarjetas. Fitzsimmons también sugiere usar una correa colgante para el celular.
“Podés llevarlo en bandolera y en el bolsillo y, al sacarlo, estará mucho más seguro, más cerca de vos, para que nadie te lo pueda arrebatar de la mano”, dijo.

Tener una tarjeta de crédito de emergencia o dinero en efectivo a mano es útil en caso de que necesites cambiar de planes o mudarte a otro hotel. Guardá tus fondos de emergencia en un bolsillo o bolso separado de tu billetera y otros documentos.
Puede ser inteligente no publicar nada en las redes sociales hasta que no hayas regresado de un viaje para evitar difundir tu ubicación.
4) Conocer gente
Viajar sola no significa estar sola todo el tiempo. NomadHer es una aplicación gratuita diseñada específicamente para mujeres que viajan solas para ayudarlas a encontrar compañeros de viaje, alojamientos acogedores y consejos de viaje.
Sarah Radzihovsky, de 28 años, que trabaja para una empresa de tecnología, recomienda los albergues Selina, ya sea para alojarse o trabajar a distancia. “Es un albergue de coworking y coliving súper social en todo el mundo”, dijo. “Aunque no me aloje en el Selina, sé que podría pasar un rato con gente allí”, dijo.
Sara Callon, de 34 años, jefa de personal de una empresa de energía con sede en París, recomienda hacer una visita guiada a pie el primer día de un viaje en solitario. En Roma, Callon conoció a otras dos mujeres que viajaban solas a través de Rome Free Walking Tour, y las tres se reunían para tomar algo todas las noches.
“Fue divertido tener un momento de contacto social cuando oscurecía, después de recorrer la ciudad sola todo el día”, dijo.
Los viajes en grupo, los foros en línea y los eventos locales pueden ser formas fáciles de conocer gente con intereses similares. En Hawái, Vietnam y México, Radzihovsky utilizó Facebook para encontrar grupos de senderismo y partidos deportivos improvisados que se organizaban semanalmente.
“Jugar al fútbol, al vóley playa o hacer surf son formas muy buenas de conocer gente porque, en primer lugar, la barrera del idioma no es un obstáculo y, en segundo lugar, es una forma de conexión muy sana”, dijo Radzihovsky.
Sophie Stuber / The New York Times / Especial para Clarín
Traducción: Elisa Carnelli